El verano, la playita, el calor, la pivas y los pives en bañador... Factores que hacen que las salas de entrenamiento o de boulder queden en el olvido durante la estación estival. No se si el calor hace que olvidemos lo bien que se está en invierno, durante una semana lluviosa, bajo el calor de las presas, desconectando de la rutina resolviendo problemas de boulder y pasando un buen rato con los colegas descubriendo nuevos pasos y vías... Quizás por éste sofocante calor este invierno nos quedemos sin ese lugar donde ir cada tarde a ver a los colegas, compartir afición y apretar un rato. Quizás por la falta de compromiso de aquellos que un día se implicaron con el proyecto de mantener una sala de boulder unos pocos nos quedemos este invierno sin la sala.

Por el motivo que sea "La Puerta Amarilla" corre peligro... Ahora más que nunca debemos comprometernos con la causa y apostar, sí o sí, por este lugar. Chic@s, se acaba agosto, las vacaciones. Los pives y pivas pronto se quitarán los bañadores, cambiarán la hora y las tardes se hará más corta. Bajarán las temperaturas y quizás (espero que no) este invierno sea frío y lluvioso. Cuando esto ocurra, todos querremos tener un lugar donde entrenar y apretar. Quizás no esté ya... o quizás el Maik no os deje entrar... por capullos....